18/10/2021 | Blog
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18/10/2021 | Blog
Una sonrisa bonita y una dentadura sana han sido consideradas importantes desde siempre, de ahí que el origen de la pasta dentífrica para una correcta salud bucodental se remonte miles de años.
La primera pasta de dientes data de la época egipcia y fue conocida como clisterate.
Los egipcios fabricaban esta arcaica pasta mezclando piedra pómez pulverizada, sal, pimienta, agua, uñas de buey, cáscara de huevo y mirra.
La cultura grecorromana heredó esta costumbre, e incluso decidieron usar su propia orina a modo de colutorio, ya que se creía que contenía propiedades blanqueadoras.
Los árabes empleaban arena fina, hasta que se dieron cuenta de que esa práctica era altamente abrasiva para el esmalte de sus dientes.
Los mayas hacían uso de distintas técnicas y brebajes. Empleaban sustancias de origen vegetal y animal, como por ejemplo raíces, que apretaban contra los dientes para tratar diversas afecciones. A modo de analgésico, usaban un bálsamo elaborado con cenizas de iguana.
En 1850, Washington Sheffield Wentworth, un cirujano dental y farmacéutico inventó la primera pasta de dientes, pero fue su hijo el que optó por envasarla en tubos metálicos, similares a los de la actualidad, e intentar comercializarla. Aunque hasta 1856 no se empieza a distribuir tal y como lo conocemos hoy.
Es en 1901 fue cuando se empezó a investigar en odontología el uso del flúor, aunque hasta 1914 no se empiezan a elaborar dentífricos que contengan dicha sustancia.
Actualmente, el deseo de lucir una sonrisa bonita y saludable ha dado lugar a una amplia variedad de pastas dentífricas, elaboradas con distintos agentes, según su finalidad: acabar con el sarro y la placa bacteriana, blanquear nuestra sonrisa o reducir la hipersensibilidad dental.
Aunque parezca increíble hay mucha gente que no tiene el hábito de cepillarse los dientes diariamente. Un acto tan fácil y simple de realizar a muchos les da pereza hacerlo. Y esto puede llevar a tener consecuencias funestas para la salud bucal y dental: sarro, caries, gingivitis, mal olor…
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